Escapada de 2 días a la antigua Éfeso y las aguas termales de Pamukkale desde Bodrum

Día 1: Éfeso y la Casa de la Virgen María (A, C), hotel de 4 estrellas en Pamukkale.
A primera hora de la mañana, dejará el hotel para dirigirse a la ciudad de Mugla. Allí haremos una parada para el desayuno (incluido en el precio). Explorando la ciudad de Éfeso empezaremos por la parte administrativa reservada para los políticos romanos. Este es el lugar donde sigue estando el odeón (parlamento), un ágora para reuniones y manifestaciones políticas o antiguo hospital. Recorriendo las calles de mármol que estaban iluminadas en la antigüedad llegaremos a la parte pública. Es en este lugar donde se ubicaban los establecimientos de ocio, entre otros, los baños romanos, el bar o las letrinas. Entrará en la inmensa biblioteca Celsius, que es a su vez la tumba del gobernante. Al final de la excursión por toda la ciudad visitará un gran teatro romano. Iremos a las tribunas para comprobar su acústica. Después de explorar Éfeso, pondremos rumbo al restaurante para disfrutar de un almuerzo (incluido en el precio).
Después de la comida, nos dirigiremos a la ciudad de Selcuk, pasando por los restos de la Basílica de San Juan con su tumba, el Templo de Artemisa y la fortaleza de la Edad Media. Haremos una parada durante un rato en un taller de joyas turco. Éfeso es también el último lugar donde vivió la Madre de Dios. Todos los interesados podrán visitar su casa-santuario por su cuenta. El resto del grupo durante ese tiempo podrá visitar las atracciones de la ciudad de Selcuk. Después de reunirse en el lugar de encuentro, subirá a bordo del autobús para continuar el viaje directamente al hotel, donde podrá disfrutar de una cena y relajarse durante la tarde.
Día 2: Pamukkale e Hierápolis (D)
La primera parada del día será a las puertas de Hierápolis, a tan solo un corto trayecto por carretera desde el hotel. Hierápolis fue un balneario durante la época romana. Los baños romanos, la basílica, el gimnasio, la calle de la "columna" y la antigua necrópolis, donde encontrará más de 1000 antiguos sarcófagos bien conservados. El hermoso teatro en una colina también vale la pena visitarlo.
Sin embargo, Pamukkale está formado principalmente de travertino blanco y ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Podrá atravesarlo adentrándose en las aguas termales que fluyen por el travertino. Seguramente será un gran masaje y alivio para los pies cansados. Si quiere probar el tratamiento exacto de las aguas de Pamukkale, pruebe el baño de burbujas (champán) en la piscina de Cleopatra (con cargo adicional). Las aguas curativas tratan, entre otras dolencias: la obesidad, el reumatismo, el asma y las enfermedades de la piel, y lo más importantes, le devolverá un aspecto fresco y joven. Se dice que Pamukkale fue el secreto de belleza de la seductora Cleopatra.
Después de hacer turismo y tomar un baño, visitará e ira de compras en el verdadero centro de fabricación de artículos de cuero y alfombras en los que muchos turcos están especializados desde hace siglos. No se olvide de la tradición de regatear el precio. El camino de vuelta le conducirá otra vez a los montes Tauro y estará de vuelta en Bodrum por la noche.