Torre del Reloj Astronómico: Sin colas + Introducción

Hacer cola para visitar un reloj es la paradoja del tiempo perdido atrapada en un bucle. Claro está, si el reloj es una maravilla de hace 600 años obra de la ingeniería medieval, bien merece la pena. No obstante, esta entrada sin colas te coloca en el primer puesto de la fila para que puedas visitar la torre del reloj gótico y descubrir el interior del reloj astronómico en funcionamiento más antiguo del mundo.
El tiempo vuela cuando lo pasas bien, así que no dudes en tomar la vía rápida para acceder al mundialmente famoso Reloj Astronómico de Praga. Para recoger las entradas, localiza al guía en la pintoresca plaza de la Ciudad Vieja. Te esperará bajo un paraguas azul y blanco, llueva o haga sol.
A continuación, visita el reloj. Cada hora, se abren unas ventanillas tras las que desfila el mismísimo Cristo seguido de sus discípulos. La Santa Muerte también tiene una campanada, para ver a quién le ha llegado su hora (lógicamente, ¡todos dicen que no con la cabeza!).
El reloj contiene movimientos planetarios y el zodíaco. Además, el 75% de sus piezas son originales, es decir, del siglo XV.
Con estas entradas evitarás las colas y subirás por las escaleras o en el ascensor hasta lo alto de la torre. Desde allí, tendrás excelentes vistas a la plaza de la Ciudad Vieja y al resto del centro histórico de Praga.
Cuando pises de nuevo el suelo de Praga, piensa en el poder de la permanencia de este reloj. Es una ocasión adecuada para rememorar las palabras del ensayista inglés Henry Austin Dobson:
El tiempo pasa, ¿dices? ¡Ah, no! El tiempo se queda; nosotros somos los que pasamos .
Solo eso debería animarte a aprovechar al máximo tu tiempo en Praga.