Entrada al museo Leopold de Viena

Las obras del museo Leopold integran una de las colecciones de arte austríaco moderno más importantes del mundo. Sus más de 5000 exposiciones fueron recopiladas por Rudolf y su mujer Elisabeth Leopold durante un periodo de más de cinco décadas. En 1994, Rudolf Leopold consolidó la colección con la ayuda de la República de Austria y el Banco Nacional de Austria, hasta convertirla en la Fundación Privada Museo Leopold, una entidad privada sin ánimo de lucro.
El museo Leopold es un centro único y activo, rebosante de luz y ubicado en el corazón de Viena, y constituye también el imán cultural más potente del MuseumsQuartier. Además de las emocionantes exposiciones especiales, alberga la colección más abundante e importante de Egon Schiele en todo el mundo, así como obras fundamentales de Gustav Klimt, de valor incalculable, como la que probablemente es su pintura figurativa clave, "Muerte y vida". En ningún otro museo de Viena es posible acercarse tanto a la famosa "Viena de fin de siglo" y contemplar el nacimiento de la modernidad. La colección muestra cómo el arte de la Monarquía de los Habsburgo evolucionó de un historicismo estricto al impresionismo más luminoso en solo unos pocos años, hasta llegar al modernismo vienés, único en todo el mundo, que incluye a Klimt y Schiele, así como a Oskar Kokoschka, Richard Gerstl, Koloman Moser y muchos otros artistas bien representados con obras fundamentales en el museo Leopold.
Otro de los puntos esenciales del museo es el periodo de entreguerras austríaco, que dio lugar a la aparición de importantes artistas como Albin Egger-Lienz, Anton Kolig y Herbert Boeckl, y que en parte apunta ya en la dirección de la segunda mitad del siglo XX. Esta es la razón por la que artistas austríacos de la generación de la posguerra u obras excepcionales del siglo XIX de Ferdinand Georg Waldmüller, Friedrich Gauermann, August von Pettenkofen, Anton Romako, Emil Jakob Schindler, Carl Schuch y otros artistas aparecen repetidamente.
Un gran número de objetos cotidianos sorprendentemente modernos de fin de siglo completa la colección, en la que Otto Wagner, Adolf Loos, Dagobert Peche y los fundadores de la Wiener Werkstätte, Josef Hoffmann y Koloman Moser, merecen una mención especial.
Además, dado que todos los grandes artistas del modernismo vienés se reunían de forma habitual en los cafés de la época para llevar a cabo inspiradores intercambios, por supuesto también hay una cafetería en el museo Leopold. En el Café Leopold, puede relajarse y repasar su visita a la colección del museo, recopilada en el transcurso de cinco décadas por Rudolf Leopold y su mujer Elisabeth, y que ahora alberga más de 5000 obras de arte.